La década de los años 70 comprende desde el 1 de enero de 1970 hasta el 31 de diciembre de 1979, durante este lapso de tiempo tuvieron lugar una extensa cantidad de sucesos, donde resaltan las dictaduras latinoamericanas con figuras como: Pinochet en Chile, Videla en Argentina y Fidel Castro en Cuba, crisis petroleras, el final de la guerra de Vietnam, escándalos políticos como el caso “Watergate”, y la popularización de aparatos como el microondas, la calculadora y la televisión a color. La moda de los 70 es tan emblemática como su época.
Así mismo, se desarrolló toda una generación de íconos musicales, algunos de los más destacados son Bing Crosby, Freddie Mercury, Frank Sinatra, y Marvin Gaye, además de estrellas del cine como Cher, Jhon Wayne, y Al Pacino.
Muchos de estos eventos, repercutieron en la vestimenta de la época, es decir, en la moda, que según la Real Academia Española (RAE) se define como “el uso, modo o costumbre que está en boga durante algún tiempo, o en determinado país, con especialidad en los trajes, telas y adornos, principalmente los recién introducidos”. Etimológicamente el término moda, proviene del francés “mode” y el latín “modus”, es decir, manera o medida.
La moda es un reflejo y representación del comportamiento humano y de los cambios sociales, políticos, y culturales de un momento o época determinada, esta genera particulares alteraciones en el comportamiento de quien la consume, con tendencia a seguir e inclinarse a una indumentaria y conducta específica. En el caso de la moda de los 70, se caracterizó por movimientos libres y novedosos, ideas que trascienden en el tiempo y grandes representantes como Vivienne Westwood.
Esta década representa la continuación y evolución de la moda de los años 60, el concepto estuvo realmente guiado hacia la transmisión de un sentimiento de libertad de expresión, marcado además por las constantes marchas y protestas propias de este periodo.
Los años 70 dieron lugar a muchas ideas nuevas, en parte desencadenadas por la música del momento, que perseguían y defendían causas y comunidades reprimidas en el pasado, bajo un contexto nuevo de derechos civiles, buscando reinventar conceptos y percepciones. El auge de la liberación sexual jugo un papel fundamental, abogando por causas como la aceptación social de las relaciones sexuales prematrimoniales y la igualdad de género.
También destaca el movimiento LGBT (lesbianas, gais, bisexuales y transgénero), que consiste en un importante levantamiento social y cultural en el cual se lucha por los derechos e igualdad para personas pertenecientes a minorías, con una orientación sexual distinta a la heterosexual, rechazando rotundamente la discriminación de cualquier tipo y promoviendo ideales como el amor libre. El apogeo del feminismo genero fuertes cambios en la mentalidad colectiva, pretendiendo mejorar la educación sexual, la libertad laboral, la garantía legal de sufragio, y la libertad matrimonial y reproductiva.
Gracias a este particular ambiente social, se propició una notable modificación en la noción tradicional de lo que implica la feminidad, y en menor medida la masculinidad. Se desarrolló una fusión de estilos, que variaron desde los cortes de cabello hasta los materiales usados al vestir.
La moda de los 70, estuvo influenciada por múltiples tendencias y corrientes, al inicio del periodo se consolido el estilo hippie, iniciado a mediados y finales de los 60, que destacaba la libertad y comodidad al momento de vestir, más adelante, a partir del año 75 predomino la cultura punk, con propuestas más duras y agresivas. Sin embargo, ambos estilos convergen en la lucha por un movimiento de libertad, utilizando la moda como medio de rebelión ante los problemas e injusticias sociales del momento.
Con base en lo anteriormente expuesto, se comprende el trasfondo de prendas características de la época, por ejemplo, el uso de pantalones, en especial los botas elefante o campana, que rechazaban la asociación de una prenda a un género específico, e impulsaban así el empoderamiento femenino.
De igual forma, el pelo largo y en menor medida el maquillaje, antes restringido sólo para el uso de mujeres, empezó a ser usado por figuras masculinas, entre ellos David Bowie, rompiendo el esquema tradicional y destacando que el maquillaje no tenía por qué ser indicador de homosexualidad. Muchos de estos eventos, inspiraron propuestas nuevas como los salones de belleza unisex.
Década de tendencias y propuestas
En los años 70 se forjó una moda donde lo más importante no era lucir bien, que dejo de lado los apretados corsés y el glamour del pasado, para dar paso a un enfoque antiestético y estilo más cómodo, libre, e incluso psicodélico, transformando el vestuario en un medio de expresión, a través de diseños como el pantalón de campana y el cuello tortuga. Términos como “retro” dieron pie a la ropa usada, favoreciendo también el ahorro económico.
Al comienzo de esta época, destaco el movimiento hippie, palabra que etimológicamente proviene del vocablo inglés “hip” que quiere decir “novedoso, moda”, esta tendencia promovió la vida comunitaria y despreocupada, caracterizada muchas veces por viajes y nomadismo. Prendas con fuertes colores, estampados psicodélicos y extravagancia en las camisas, vestidos, faldas e incluso en ropa interior.
Esta corriente logro una fuerte influencia con los pantalones bota elefante, mayoritariamente en tonalidad purpura, amarilla, naranja y fucsia, acompañados del pelo largo y algunas veces afro, camisas anchas, y predominio del consumo de drogas en gran parte de sus seguidores, buscando llegar a “posibilidades alternas”.
El estilo hippie se describe como un movimiento libre, rebelado contra muchas realidades como la guerra, que fomento frases como “prohibido prohibir” y “derechos civiles e igualdad”. Posteriormente esta manifestación de origen estadounidense fue producto de inspiración para nuevas tendencias a nivel mundial, como el “boho” en España.
Al final de la década, el punk prevalece como estilo dominante, defendiendo el pensamiento rebelde y antisistema, generando términos nuevos como androginia, que según la RAE es sinónimo de hermafrodita, ideas totalmente contrastantes con la forma de vestir del momento.
Es importante mencionar que, en este movimiento, hubo una relevante retroalimentación entre la música y moda, con la inspiración de bandas como: Los Ramones, Sex Pistols, The Clash, X-Ray Spex y Generation X. En cuanto a las prendas más usadas, sobresale el cuero y denim como elemento principal, camisetas con mensajes políticos, pantalones entallados con agujeros, medias de malla, chaquetas moteras y botas militares, todo bajo un intenso color negro.
Las mujeres se concentraron en utilizar y adaptar artículos masculinos para crear una nueva femineidad, por medio de una imagen violenta, cabello corto o rapado, pintado con colores llamativos, faldas cortas y medias de malla, sumadas a un maquillaje cargado de delineados gruesos. Por otra parte, en el lado masculino, destacan las cadenas metálicas, taches, y el novedoso uso del maquillaje. En ambos sexos prevaleció el uso de perforaciones y tatuajes.
Materiales y personajes innovadores de la época
Tal y como se planteó anteriormente, los colores intensos y estampados en tela, dominaron los inicios de este periodo, y posteriormente el color negro, cuero y denim se apoderaron de la vestimenta social. Por las características de la época, muchos de los diseñadores del momento, se reinventaron y desafiaron las líneas de lo tradicional con nuevas propuestas arriesgadas. Entre los iconos de moda de la década, destaca: Vivienne Westwood, Thierry Mugler, y Oscar de la Renta.
La diseñadora de origen británico Vivienne Westwood, marca pauta e innovación al participar en todo tipo de protestas por los derechos civiles con controversiales frases como “mi objetivo es hacer que los pobres parezcan ricos y que los ricos parezcan pobres”, además, es considerada una de las creadoras de la movida punk.
El punto de mayor éxito llega cuando Vivianne conoce a Malcolm McLaren, quien más adelante sería manager del grupo Sex Pilots, banda que utilizó y popularizó los diseños de la británica. Para 1971 abren juntos una tienda denominada “Let it rock” que más adelante, pasaría a llamarse “sex”. Algunos de sus motivos de inspiración fueron los motociclistas y prostitutas, en sus diseños asimétricos incluía elementos polémicos como hojillas de afeitar, cadenas de bicicleta y collares de perro. Muchas de sus creaciones impactaron por el uso de telas tradicionales como el tartán, dando así paso a la estética punk sin ningún tipo de restricciones.
En cuanto a los materiales, variaron por la particular diversidad de la época, las faldas maxis y minis presentaban una amplia gama de diseños que se popularizaron rápidamente. Algunos de estos diseños y patrones, se establecieron como elementos de la movida hippie, entre ellos la indumentaria étnica, con representaciones como bolsos de crochet, ponchos sudamericanos, camisas africanas y kimonos. Así mismo, ciertas personalidades del medio artístico, se inclinaron por optar a un estilo cómodo como Jane Birkin, Farrah Fawcett-Majors, y Lauren Hutton.
Los zapatos de plataforma, fueron fabricados en distintos modelos, desde suecos hasta sandalias, en el trascurso de la década destaca también el uso de botas altas y militares, además de los zapatos deportivos. En sus finales, domino el cuero, la ropa desgarrada con mensajes políticos y prendas modificadas con huecos, logos y taches.
El contexto y las tendencias de la época, llevo a que los diseñadores y personalidades del momento como Versace y Oscar de la Renta, reinventaran sus colecciones, mantuvieran su esencia y simultáneamente arriesgaran más para satisfacer las necesidades de una época con sed de propuestas nuevas y rebeldes.
Conclusión
Los años 70 dieron lugar y contexto a una serie de cambios sociales, ocasionando en la colectividad un sentimiento de despertar, que fue transmitido directamente a la moda, y por ende a la indumentaria de los hombres y mujeres de la época. Durante esta década se desarrollaron 2 corrientes principales: el movimiento hippie y el movimiento punk, que compartieron ideales de descontento e inconformismo con lo establecido, pero canalizándolo de manera distinta.
El movimiento hippie a principio de la década tuvo influencia sobre la moda con una propuesta más relajada y libre, buscando expresar su forma de pensar a través de mensajes pacifistas en ropa holgada, pantalones acampanados con fuertes colores como el naranja o fucsia, acompañados de estampados psicodélicos y extravagancia en las camisas, vestidos, e incluso faldas.
A finales de la década la corriente punk, estableció ideas basadas en un mundo sin esperanzas, con modelos anarquistas, antimilitaristas y anticapitalistas, impulsó durante este periodo un cambio en la moda con el uso de prendas negras de cuero y demin, camisas con mensajes políticos, pantalones pegados con agujeros, medias de malla, chaquetas moteras y botas militares.
La proliferación de opiniones e ideas, trajo consigo movimientos, campañas y protestas que llevaron a tocar y destapar muchas problemáticas sociales, sumado a la reinvención de prendas del pasado por la inherente necesidad de innovar conceptos y desprenderse de generalizaciones retrogradas, generando disputas y puntos de debate por los derechos de comunidades reprimidas como el LGBT, y tratando de crear nuevas percepciones acerca de la feminidad, el control natal y la educación sexual.
